Hace unas semanas os preguntaba por instagram si os apetecía que escribiera un post sobre cocinas y como la mayoría dijisteis sí, aquí estoy con un post dedicado a ellas.
La cocina se ha convertido de los espacios donde se pasa una parte importante del tiempo que estamos en casa. Para muchos; el momento de cocinar se convierte en un momento de desconexión y disfrute, para otros el de comer o cenar rodeados de compañía donde poder charlar tranquilamente y pasar un rato juntos. Otros en cambio, prefieren pasar de puntillas y pisarla lo menos posible.
Lo que sí es cierto es que una buena distribución en la cocina ayuda y facilita mucho las tareas.
A la hora de planificarla es importante pensar en la ella como zona de trabajo y no pasar por alto diferentes aspectos de vital importancia.
Si estás pensando el reformarla te aconsejo que eches el freno y pienses detenidamente cuáles son tus necesidades reales en la cocina. Dentro del formulario que envío a mis clientes están por ejemplo alguna de las siguientes preguntas:
Todas estas cuestiones te harán reflexionar sobre los espacios que necesitas dentro de la cocina y conocer mejor aquello que necesitas.
A nivel informativo te contaré que existen tres funciones principales en las que dividir las zonas de trabajo
- Zona de almacenamiento. Frigorífico
- Zona de preparación y limpieza. Fregadero
- Zona de cocción. Vitrocerámica.
Estos tres puntos y la línea imaginaria que los une se conoce como el “Triángulo de trabajo”; una teoría que se desarrollo en los años 40 y que consiste en conectar las principales zonas de trabajo de la cocina y los recorridos que se realizan en ella.
Para que nuestra cocina resulte lo más práctica y cómoda posible es importante tener estos tres puntos en cuenta y su conexión entre ellos a la hora de hacer la distribución.
En muchas ocasiones y debido al tipo de planta que encontremos en la cocina, será imposible llevarla a cabo, pero podremos variarla y acomodarla a nuestras necesidades.
A continuación, he preparado un pequeño resumen de aquellos aspectos que no debes pasar por alto si tienes en mente hacer una reforma en tu cocina; espero que sean de tu interés. ¡Allá vamos!
Materiales: elige materiales de fácil limpieza, que no se rayen ni se estropeen fácilmente con el calor, en el mercado existen una gran variedad de acabados. Para el frente de la cocina puedes apostar por compactos o cristal templado, las piedras o acero inoxidable son otra opción, de éste modo te ahorras la limpieza de juntas. Los porcelánicos también son una de las opciones más recurrentes. Te aconsejo, que el frente de la zona de trabajo que es la que más sufre las salpicaduras lo recubras con cualquiera de éstos materiales.
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Electrodomésticos: invierte en un buen grupo extractor, ten en cuenta que es la encargada de eliminar la grasa en suspensión, los humos y olores, cuánto más potente, más eficaz. Una buena elección también te ayudará a reducir el gasto de energía. Una vez conozcas la distribución de tu cocina, asesórate de qué grupo filtrante se ajusta mejor a tus necesidades.
No te dejes llevar por las tendencias del momento, piensa que una cocina es una inversión a largo plazo y un espacio con el que vas a convivir durante muchos años.
Una buena iluminación es fundamental, apuesta por una iluminación cálida para que no parezca un espacio frío tipo laboratorio. La iluminación bajo los muebles altos o en la zona de trabajo es siempre muy útil y necesaria.
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Si vas a hacer reforma u obra, puedes contemplar la opción de ampliar la cocina. Abrir la cocina a otras estancias es una oportunidad de conectarla con el resto de la casa; aquí es donde pasan la mayoría de las cosas y se comparten grandes momentos, de ésta manera estarás multiplicando las ocasiones de compartirla.
Cumple las normas de seguridad, no debemos pasar por alto éstas normas a la hora de diseñar nuestra cocina, a grandes rasgos te contaré que entre la zona de fuego y el fregadero debe haber una distancia mínima de 60 cm (45 cm en cocinas pequeñas). Los enchufes deben estar a una distancia mínima de 50 cm de la zona de fuegos y de la de agua.
Para que tu cocina sea práctica y funcional debes guardar unas distancias mínimas para que los flujos de circulación funcionen entorno a ella. La distancia mínima que hay que dejar es de 90 cm para que puedas abrir puertas, cajones o electrodomésticos ( Aunque para mayor comodidad y si es posible siempre es recomendable unos centímetros más). En el caso de cocinas en isla o península apuesta por una distancia mínima de 100/ 110 cm.
Siempre que puedas elige módulos extraíbles, como por ejemplo cajones y gavetas, frente a módulos con puertas. El motivo; mayor comodidad a la hora de buscar cualquier elemento, ya lo tienes todo a la vista y no tienes que agacharte a buscar nada, además no se queda ningún rincón olvidado. También te ayudará a tener todo en orden. La peor parte es que éste tipo de módulos encarecen más el presupuesto de mobiliario.
Si no tienes ganas de meterte en obras, actualmente puedes encontrar cantidad de productos que te permiten hacer una lavado de cara sin necesidad de obras y sin que tu bolsillo se resienta mucho. Puedes utilizar pinturas especiales para azulejos o muebles. Revestir superficies o puertas, cambiar tiradores y textiles y tendrás una cocina nueva por mucho menos de lo que imaginabas.
Apuesta por un profesional que te ayude a sacar el mejor partido a tu cocina, dará respuesta a todas tus dudas y ahorrarás en equivocaciones y disgustos.
Por último, si tu cocina es pequeña te recomiendo que:
- Apuestes por tonos neutros, si es blanco mucho mejor, ganarás amplitud y luminosidad.
- Con los revestimientos sin juntas conseguirás un efecto de continuidad que favorecerá la sensación de amplitud anteriormente citada.
- El orden siempre es un factor determinante, pero cuando tienes una cocina pequeña se convierte en indispensable.
- Piensa realmente a qué le vas a dar uso en la cocina y olvídate de aquellas cosas que llevan años en el fondo del mueble sin usar y ocupando espacio.
- Los frentes lisos y puertas con cristal siempre aportan mayor ligereza que el resto.
- El acabado brillo, refleja más y mejor la luz, en su contra diré que requieren mayor cuidado y limpieza.
- Aprovecha bien los metros y sácale partido al espacio.
- Una puerta corredera te ayudará a ganar espacio interior.
- Si quieres una mesa pero no tienes espacio suficiente, puedes optar por mesas o barras abatibles.
- Si necesitas más almacenamiento puedes poner baldas de menor fondo (20 cm) que te permitan poner vajilla y botes.
Y lo más importante; recuerda que el éxito de cualquier decoración es que tu espacio; tu hogar, hable de ti y estés representado en él.
Si estás en éste momento de cambio y necesitas que te ayude o asesore, escríbeme a hola@amarillomimosa.es
Y si te has quedado con ganas de más, te invito a que te unas a nuestro grupo cerrado de Facebook Amarillo Mimosa Decor ahí trataremos todo lo relacionado con éste post, si quieres hacerme alguna pregunta sobre tú cocina, te espero allí para resolverla.
Gracias por pasar por aquí!