Hace unos meses incorporamos a la habitación del peque el archiconocido armario Ivar de Ikea, un mueble camaleónico por un precio más que competente.
En mi caso buscaba un armario de almacenaje que sirviera para guardar cajas con juegos y no se me fuera el bolsillo en ello. Un mueble ligero con poco fondo y que encajara con el estilo de la habitación, a día puedo decir que estoy contenta con el resultado.
Un día navegando por Pinterest me fui enganchando a todos los DIY o «hacks» que hay de esta serie. Sin duda un mueble muy versátil que es capaz de encajar en cualquier estancia de la casa y ajustarse a cualquier estilo decorativo.
Una buen ejemplo de que no es necesario hacer una gran inversión en un mueble para conseguir un buen resultado. Todo es cuestión de visión, imaginación, un pequeño estudio previo para saber que cumple con tus necesidades y con las necesidades estéticas de espacio y listo!.
Con un poco de pintura, unas patas o unos tiradores puedes conseguir cambiar por completo la estética del armario, el resultado será un mueble capaz de mimetizarse con el ambiente. Comparto con vosotros algunas de las opciones que más me gustaron.
En algunos de estos cambios incluso cuesta reconocer que el mueble en cuestión se trata de la estantería Ivar.
No te preocupes porque si eres de “los clásicos” y apuestas por dejarlo al natural, puedes conseguir espacios tan personales y tan bien resueltos como éstos.
Sin duda, la serie Ivar de Ikea es un buen ejemplo de que por poco menos de 70 euros, puedes crear todo tipo de ambientes.
Y tú, ¿eres de los que le gusta personalizar los muebles?
Espero que os haya gustado e inspirado, nos vemos pronto!.
Todas las imágenes utilizadas para ilustrar éste post son obtenidas de Pinterest.